James E. Talmage, "el hombre más inteligente" según Albert Einstein

31.07.2011 18:31

En una ocasión preguntaron a Albert Einstein cómo se sentía al ser el hombre más inteligente. Él dijo: No lo sé, pregúntenle a James E. Talmage". Me parece que sería interesante relatar una experiencia de alguien a quién Einstein consideraba el hombre más inteligente.

 James E. Talmage mostró gran amabilidad a una familia vecina en apuros. Eran perfectos desconocidos para él. En esta época él era un joven padre de familia y se dio cuenta del gran sufrimiento que estaban padeciendo en casa de un vecino cuya numerosa familia se vio afectada con la temida difteria. No le importaba que no fueran de sus mismas creencias, su bondad y amor le movió a actuar. Hubo otras personas que trataron desesperadamente de encontrar gente para ayudar, pero no se logró a nadie debido a la naturaleza contagiosa de la enfermedad.

Cuando llegó James, se encontró a un niño pequeño que ya estaba muerto y a otros dos que estaban sufriendo de una manera agónica la enfermedad. De inmediato se puso a trabajar, limpiando la casa, preparando el joven cuerpo para el entierro, limpiando y proveyendo de todo lo necesario para los otros niños enfermos y se pasó el día entero haciéndolo. Volvió a la mañana siguiente para descubrir que uno más de los niños había muerto durante la noche. Una tercera niña todavía estaba sufriendo terriblemente. Él escribió en su diario: "Ella se aferró a mi cuello, tosiendo muchas veces sobre mi cara y mi ropa,... pero aun así yo no la podía apartar de mí. Durante la media hora inmediatamente anterior a su muerte, estuve caminando por la casa con la criatura en brazos. Ella murió con mucho dolor a las 10 de la mañana." Los tres niños habían fallecido en el plazo de 24 horas. Más tarde ayudó a la familia con los arreglos del entierro y habló en sus servicios funerarios.

James E. Talmage, "el hombre más inteligente" según Albert Einstein, hizo todo esto por una familia de extraños. Para muchos, lo que él hizo puede que sea de todo menos inteligente.

Sin embargo, para los que buscamos crecer en valores que consideramos correctos como los que él demostró en esta ocasión, debemos estar agradecidos por enseñarnos con sus actos cómo podemos amar a nuestros semejantes de una manera absolutamente incondicional.

¡Qué gran ejemplo!